Fumar daña inmediatamente casi todos los órganos del cuerpo.

Tu cerebro: La nicotina literalmente te cambia el cerebro. Es tan adictiva como la heroína. Cuando dejas de fumar/vapear, puedes sentirte con ansiedad, irritable y con antojos muy fuertes de fumar/vapear.

Tus oídos, ojos y boca: Fumar puede causar pérdida de la audición, baja visión nocturna, cataratas, caries, pérdida de dientes, enfermedad de las encías; y cáncer de la boca y la garganta.

Tu cara: Fumar/vapear causa sequedad de la piel, arrugas y estrías.

Tu corazón: Fumar/vapear nicotina aumenta la presión arterial y el esfuerzo del corazón. Aumenta tu riesgo de tener coágulos de sangre, ataque cerebral e infartos.

Tu ADN (material genético): Cada vez que aspiras el humo de un cigarrillo dañas tu ADN lo que puede causar cáncer. Un tercio de las muertes por cáncer son causadas por el uso de tabaco

Vapear no es tan seguro como crees. Vapear puede causar "pulmón de palomitas de maíz" que causa cicatrices permanentes en las vías respiratorias de los pulmones. El pulmón de palomitas de maíz puede dificultar la respiración y actualmente no existe tratamiento para ello.

También se sabe que el vapeo causa una enfermedad pulmonar grave llamada EVALI (E-cigarette o Vaping use-Associated Lung Injury). De 2000 pacientes con EVALI, el 95% fue hospitalizado. La mayoría eran menores de 35 años.